Terrasini y Cinisi

Vive un viaje de senderismo regenerador sumergido en la maravillosa naturaleza de Piano Margi, donde pastan las vacas de Cinisi, en Pizzo Peluso, Montagna Longa, también ideal para practicar motocross, y Pizzo Montanello, justo encima de Cinisi. O pasea en bicicleta de montaña por la reserva natural de Capo Rama, a pocos kilómetros de Terrasini.

En Terrasini tómate tu tiempo para descubrir las colecciones del Museo Regional de Historia Natural Henri d’Aumale, una de las paradas imprescindibles del arte contemporáneo en Sicilia, con su fascinante exposición permanente de carros sicilianos.

Coge tus gafas de esnórquel y sumérgete frente al islote de Cala Rossa, llamado así por las vetas rojizas del espléndido acantilado.

Las playas de Terrasini son perfectas para el surf y el windsurf, la vela, el paddle surf, el kitesurf y el buceo.

La plaza principal de Terrasini, cerrada al tráfico, es el lugar ideal para tomarse un aperitivo, mientras que la playa de Praiola te espera para un agradable baño nocturno. Si te gusta empezar el día saliendo a correr, hazlo en el paseo marítimo, no te arrepentirás.

En la cercana Cinisi visita la Casa Memoria de Peppino Impastato y escucha la historia directamente de la boca de quien conoció a Peppino Impastato. Esta experiencia es un viaje interior que te hará comprender el significado de lo que llamamos turismo de compromiso.

Practicar surf en la playa de Magaggiari, comerte un bocadillo con productos locales de km cero o comprar pescado al amanecer en el puerto deportivo directamente de los pescadores son algunas de las cosas que debes probar sin duda.

Explorar las torres de vigilancia entre Cinisi y Terrasini es como dar un salto al pasado: Torre Molinazzo, Tonnara dell’Orsa y Torre Pozzillo..

La Torre Capo Rama, al final de la reserva orientada de Capo Rama, es la única de planta circular de la costa (todas las demás son de planta cuadrada).

Desde Torre Alba, siempre en Terrasini, cerca de Cala Rossa, se puede disfrutar de unas vistas impresionantes. Aquí a menudo se organizan muestras y exposiciones de gran relevancia.

Estas torres formaban parte del sistema de defensa de las torres costeras de Sicilia, destinadas a proteger las costas mediterráneas de las incursiones de los corsarios berberiscos y otomanos. Posteriormente, las mismas torres se utilizaron para el avistamiento de bancos de atún para la almadraba anexionada.

También se debe mencionar la famosa vaca de Cinisi: de su leche se obtienen la caciotta fresca, la ricota y el caciocavallo palermitano, rico en aromas para las esencias forrajeras típicas de la zona de origen.

Debes saber que en Cinisi los postres están riquísimos y antes de marcharte tienes que probar un pizzettu de helado: un trozo de pastel helado similar a la cassata siciliana, que antiguamente se vendía en la calle como un scialacori ca v’arrifrisca, es decir, un manjar refrescante.