Sicilia, Región Europea de la Gastronomía 2025
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Recuerda el suntuoso almuerzo que el príncipe de Salina ofrece a sus comensales en El Leopardo? ¿O la ”pasta ‘ncasciàta” y el arancin* de los que es goloso el comisario Montalbano?
Del triunfo literario y cinematográfico a la realidad de la tradición gastronómica siciliana, el paso es corto: ¡sigue siendo una obra maestra!
Así lo ha confirmado el Instituto Internacional de Gastronomía, Cultura, Artes y Turismo (IGCAT), que ha concedido a Sicilia el prestigioso título de ”Región Europea de la Gastronomía 2025”.
Este enésimo ”podio” internacional viene a sumarse a las recientes proclamaciones de Gibellina ”Capital del Arte Contemporáneo 2026” y Agrigento ”Capital Italiana de la Cultura 2025”, reafirmando la centralidad cultural, artística y enogastronómica de una región que es la síntesis perfecta de la civilización mediterránea.
Se trata de la primera región italiana que logra el objetivo del reconocimiento internacional como Región Europea de la Gastronomía y el Vino.
La candidatura de Sicilia, que surgió durante el evento ”Vinitaly”, bajo el impulso del Ministerio de Agricultura, fue gestionada y promovida por el Consorcio para la Protección de los Vinos de Sicilia DOC (Denominazione di Origine Controllata) y el Consorcio del Chocolate de Módica.
¿Por qué elegir Sicilia ”Región Europea de la Gastronomía 2025”? Las razones son muchas, al menos tantas como los productos típicos y de marca que la región ofrece a sus visitantes.
La gastronomía siciliana es una tentación continua: sabores, formas, olores y colores que representan todo el territorio insular y su identidad.
Cuna de la Dieta Mediterránea, Sicilia siempre ha enseñado un estilo de alimentación sano y variado que exalta el pescado y las verduras, a través de recetas como la caponata y la parmigiana, pero también los encurtidos y las recetas en las que triunfa el tomate Pachino IGP o la Carota Novella di Ispica IGP.
El «teatro» de apasionantes primeros platos, como en el caso de la ”Pasta alla Norma” considerada tan sublime como la ópera de Vincenzo Bellini, no desdeña los segundos platos de carne de granjas históricas, como el Suino Nero dei Nebrodi, ni el pescado fresco que enriquece los numerosos mercados de la ciudad.
Estos últimos son los lugares ideales para degustar la típica comida callejera siciliana: arancin*, panelle e crocché, sfincione y el inevitable bocadillo relleno de bazo (pani câ mèusa).
Los vinos y aceites de marca sicilianos están en alza, al igual que las bodegas y almazaras en las que realizar visitas y catas.
Triunfo de la cultura agropastoral, la repostería siciliana realza la autenticidad de la ricotta local con deliciosos cannoli, sfinci y cassate. Los ingredientes básicos de los granizados y postres típicos sicilianos son también las almendras, en particular la Almendra de Avola, y el Pistacho de Bronte.
Después del postre… fruta fresca, encabezada por las famosas y jugosas Naranjas Rojas de Sicilia.
¿Necesita algo más? Sicilia, ”Región Europea de la Gastronomía 2025”, ya le ha conquistado, transportándole a los felices tiempos de la infancia, cuando la merienda de la abuela se hacía con ingredientes sencillos pero… inolvidables.
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