Santa Margarita del Belice

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Enclavada en el valle del Belice, en la provincia de Agrigento, entre excelentes chumberas, que han encontrado aquí su hábitat natural, Santa Margherita del Belice disfruta de una tierra exuberante, que el curso del río enriquece con un panorama variado.

Unida a la antigua presencia de sicanos, griegos, romanos y árabes, históricamente se puede decir que Santa Margherita del Belice fue fundada el 2 de julio de 1572 por el barón Antonio Corbera, por concesión de los gobernantes españoles.

El escritor Giuseppe Tomasi di Lampedusa vivió aquí los mejores momentos de su infancia, ambientando su obra maestra, El Gattopardo, en la residencia campestre de Santa Margherita del Belice, que es a todos los efectos uno de los itinerarios literarios de Sicilia. En 1963, el director Luchino Visconti la convirtió en uno de los decorados de la película homónima basada en la novela.

¿Qué ver en Santa Margherita del Belice? Una visita sólo puede empezar por el Palacio Filangieri di Cutò y la Villa contigua, también conocida como «Palacio del Gattopardo«, hoy sede del Ayuntamiento, del Museo Gattopardo, conectado con el Parque Literario «Giuseppe Tomasi di Lampedusa» y del Teatro Sant’Alessandro.

Por el Barrio de San Vito y las ruinas del casco antiguo, deshabitadas pero supervivientes del terremoto de 1968 y ahora testigos de aquel devastador suceso, pasa también la memoria histórica de Santa Margherita del Belice, a la que se dedica el Museo de la Memoria: un espacio creado entre las ruinas de la antigua Iglesia Matriz restaurada y utilizada como exposición permanente, con cientos de fotografías que cuentan la historia de los pueblos de Belice antes y después del terremoto.

No hay que perderse un paseo por la vegetación de la suntuosa Villa Comunale, en cuyo centro se alza el templo del siglo XIX, de planta circular, de la «Casa del Café», con la adyacente estatua de Flora.

Si se pregunta qué degustar en Santa Margherita del Belice, sepa que se encuentra en la patria del vino blanco DOC Santa Margherita di Belice, fruto de una zona dedicada durante siglos a la viticultura y la olivicultura, que combina cepas internacionales con el redescubrimiento de variedades autóctonas (Grecanico y Nero d’Avola).

Para los gourmets, sugerimos maridarlo con los deliciosos quesos locales, vastedda y belicino: ambos frescos, elaborados con la leche de las apreciadas ovejas de Belice, se diferencian por la adición de la aceituna Nocellara del Belice DOP, que confiere a este último su inconfundible sabor.

¿A qué espera? Venga a descubrir la ”Ciudad del Gattopardo” y las razones por las que cada vacación en Santa Margherita del Belice se transforma en una experiencia de ”slow life”, inmersa en paisajes inolvidables, sugerencias literarias y productos genuinos.