Modernismo en Sicilia
Detalle
¡Descubramos juntos el modernismo en Sicilia!
El modernismo, también conocido en Italia como Liberty o estilo floral, es una particular declinación artística italiana que Giovan Battista Filippo y Ernesto Basile convirtieron en siciliana. El movimiento renovador asumió en las distintas naciones europeas diversas formas, todas ellas en clara alusión a la actitud de ruptura con respecto al arte anterior: Modern Style, Jugendstil, Art Nouveau, Sezessionstil y Modernismo.
El modernismo, o estilo floral en Italia, se inspira tanto en la naturaleza como en sus formas orgánicas y colores para aplicarlos a las artes y la arquitectura. Supone toda una revolución en el diseño que descubre la necesidad de unir funcionalidad y belleza en los objetos de uso cotidiano gracias a la obra de artesanos expertos que trabajan con todo tipo de materiales como la madera, oro, piedras preciosas y de construcción, papel pintado, telas o metales aplicando nuevas formas artísticas de gusto y sensibilidad.
En Palermo, capital del Modernismo, esta moda se difunde y asienta gracias a una nueva burguesía empresarial que encuentra en el Florio a los principales representantes y clientes capaces de relanzar Sicilia al mundo desde el punto de vista tanto económico como artístico. Villa Igiea, Casa Ida, Casa Florio all’Olivuzza, el quiosco Ribaudo, edificios privados como el Castillo Utveggio, la casa Basile o la casa Favaloro, son obras maestras de Basile cuidadas en el diseño hasta el más mínimo detalle para uniformarlo según el estilo floral.
En contacto directo con pintores como Ettore De Maria Bergler, los talleres Ducrot para el mobiliario y muchos otros artistas-artesanos como canteros, fundidores y orfebres, hacían florecer las fachadas, vidrieras, suelos, puertas, papeles pintados, muebles, mesas (manteles, cubiertos, porcelana), jardines de iris y calas, doncellas en flor como modernas venus de Botticeli, marcos de sarmientos y racimos colgantes, cisnes elegantes, pavos reales con colas majestuosas y elementos vegetales que recreaban la agradable impresión de estar en un jardín en simbiosis con la naturaleza, incluso en tiempos tan condicionados por la Revolución Industrial.
Villa Malfitano, en manos de la familia Whitaker entre los años 1886 y 1889, bajo un proyecto neorrenacentista del arquitecto Ignazio Greco, tiene una interesante sala «Estival», obra de Ettore De Maria Bergler que parece un auténtico jardín.
Es la «Belle Époque»: pasear por las calles Notarbartolo, Libertá, por las calles del barrio Politeama o por las calles de Mondello-Valdesi, permite respirar el ambiente de riqueza sólida, bienestar y optimismo que envolvió la Palermo de principios del siglo XX para convertirla en protagonistas del nuevo fenómeno artístico y cultural.
También en el resto de Sicilia podemos encontrar ejemplos de esta nueva moda:
En Favignana la Tonnara dei Florio, ahora testimonio de la arqueología industrial, en Trapani el Palazzo Ferrante, el Palazzo delle Poste e Telegrafo y Villa Laura. El Molino Excelsior en Valderice.
En Ispica el Palazzo Bruno di Belmonte, Palazzo Piazzese en Vittoria. También el Palazzo Musso en Pozzallo y el Palazzo Militello enEnna.
En Licata, provincia de Agrigento, el Modernismo también queda patente en de Villa Sapio, Villa Urso, Villa Verderame (hoy Bosa) y en otros edificios de la ciudad como casa Re-Grillo, Palazzo di Roberto Verderame y Palazzo Vitello. La Villa Maria en Casteltermini, construida alrededor de 1800, está rodeada de un maravilloso parque que en el siglo XX adquirió el aspecto típico del Modernismo; la capilla anexa a la villa es una mezcla de estilo modernista y morisco.
En Catania, la innovación estética modernista recibió el estímulo de una exposición temporal que mostró a los habitantes de Catania obras efímeras del Art Nouveau. Un primer ejemplo de arquitectura moderna es el evocador Palazzo Rosa del arquitecto Fabio Maiorana en via VI Aprile.
Una obra de Ernesto Basile, elegante y severa al mismo tiempo, abre oficialmente el camino a la producción arquitectónica modernista en Catania: se trata del Palazzo Manganelli en corso Italia, suntuoso teatro de la escena de El Gatopardo de Luchino Visconti. Una extraordinaria personalidad del diseño en el panorama catanés es la del arquitecto Tommaso Malerba, influenciado por el gusto del modernismo francés y alemán que encontramos tanto en el edificio de Piazza Duca di Camastra, como en la Palazzina Abate en via C. Abate y el famoso Palazzo Marano en via Umberto. En la tienda Frigeri de via Manzoni, la decoración modernista es la protagonista absoluta.
En Catania, el Teatro Sangiorgi es un edificio complejo que incluye también un café, un hotel y un restaurante. La Villa Ardizzone de Carmelo Malerba Guerreri es de estilo ecléctico-modernista.
Merece la pena visitar la bellísima estación Taormina-Giardini: el precioso edificio de estilo modernista palermitano tiene un cuerpo central elevado en dos pisos y flanqueado por dos cuerpos laterales alargados. Hermosa fachada exterior con dos torres almenadas, un dosel de hierro forjado y salas interiores móviles de madera oscura y techos decorados con frescos.
Las Officine Elettriche de Caltagirone en la zona del antiguo monasterio de Santa Clara son un edificio de 1907 diseñado por Ernesto Basile. La parte trasera de la Casa Consistorial es de estilo modernista. El Palazzo Poste e telegrafi, Casa Amico, Palazzo Magnolia y Casa quattro Stagioni de S. Fragapane son también de estilo modernista. La iglesia de San Julián (Chiesa di S. Giuliano) de época normanda fue destruida por el terremoto de 1693 y reconstruida con el alzado de estilo modernista.
En Messina encontramos otros arquitectos destacados además de Basile, como por ejemplo, Coppedè y Piacentini. Los edificios modernistas son: Villa Garner, de estilo modernista floral y construida por el arquitecto Santacaterina en 1903, Villa Martines o Villino delle Rondini con sus cerámicas de golondrinas que decoran la fachada frontal exterior. El Palazzo Dogana, el Palazzo del Governo de C. Bazzani, el edificio Cassa del Risparmio, obra de Ernesto Basile, el Cementerio Monumental y el Palazzo della Prefettura. En Milazzo, en el antiguo barrio marinero de Vaccarella, el Villino Greco y Villa Vaccarino son de estilo modernista.