Viaje por el este de Sicilia

En materia de mitología, es una experiencia única visitar las islas Eolias, morada del dios Eolo, guardián de los vientos. Una visita al Museo Arqueológico Regional de Lípari te mostrará las culturas y civilizaciones que han colonizado estos lugares. Otra bella parada son Vulcano y Estrómboli, cima de un volcán activo, por su espectacular naturaleza.

Volvemos a la costa y nos dirigimos a Taormina, una terraza sobre el mar con unas vistas espectaculares del mar Jónico y del volcán Etna que te dejarán sin palabras. El Teatro Griego es el monumento más famoso: los griegos eligieron un pintoresco promontorio para ambientar las representaciones dramáticas y musicales. Desde aquí también tenemos unas magníficas vistas de la costa de Calabria y la costa jónica de Sicilia. Después de un largo paseo para ir de compras en Corso Umberto, te recomendamos descansar en su impresionante terraza panorámica. Cada año, en junio, se celebra el Taormina Arte.

Seguimos hasta Catania, una gran ciudad cultural del este de Sicilia. Situada a los pies del volcán Etna, emana un encanto especial. El Castello Ursino, el antiguo castillo normando, la Piazza Duomo, que alberga la Catedral de Santa Ágata y el elefante negro de lava, símbolo de la ciudad, así como el Teatro Romano y el Odeón, el Anfiteatro Romano, el Teatro Massimo Bellini y el animado mercado de pescado son solo algunas de las cosas que no puedes perderte. El centro histórico es patrimonio de la UNESCO.

Toma agua y zammù (anís) en los antiguos quioscos: ¡en Catania son toda una tradición! Antiguamente eran lugares donde podías parar a la sombra de los árboles para degustar bebidas o sencillas preparaciones y encontrar alivio del abrasador sol de verano. Hoy puedes disfrutar de una variedad de refrescos a base de siropes de frutas mezclados con agua con gas natural. La bebida más típica que se puede disfrutar en un quiosco, tanto entonces como ahora, es una mezcla de agua con gas, limón y sal muy refrescante y natural. También son excelentes la de mandarina, la de limón, la horchata, la de menta y muchas más. Los siropes utilizados para la preparación son estrictamente de producción artesanal.

Ahora hacemos un recorrido por el Etna, uno de los volcanes activos más espectaculares del mundo.

Lo ideal es llegar al Refugio Sapienza, en el lado sur, y desde allí continuar en el teleférico para admirar un paisaje formado por cráteres y rocas de lava. Te parecerá que estás en la Luna.

Después del Etna, nos dirigimos a Siracusa, no sin antes haber hecho una parada en la Reserva Natural Orientada de Pantalica. Su necrópolis rupestre es uno de los lugares protohistóricos más fascinantes de la isla, un ejemplo clarísimo del paso de la Edad del Bronce a la Edad del Hierro.

Desde allí llegamos a Siracusa, reliquia viviente del mundo antiguo, una de las mayores polis de la Magna Grecia. Salimos del templo de Apolo y nos dirigimos a la Piazza Duomo, una de las plazas más bellas de Italia, rodeada de numerosos palacios de estilo barroco y adornada con la presencia de la Catedral, que alberga el templo dórico más importante de la polis dedicado a Atenea.

No olvides visitar la iglesia de Santa Lucia alla Badia que custodia «El entierro de Santa Lucía» de Caravaggio.

Luego baja hasta la fuente de Aretusa y continúa la visita en el Parque Arqueológico de Neapolis, que contiene la zona más antigua y monumental de la ciudad. En el interior se puede admirar el Anfiteatro Romano, el Teatro Griego y la Latomía del Paradiso, una antigua cantera de piedra dentro de la cual se encuentra la Oreja de Dioniso, una cueva con una forma particular. ¡Suelta un grito y escucha el eco!

Déjate enamorar por el barroco de Noto, su majestuosa catedral y todo su centro histórico.

Sigue hasta Módica: su centro está tan repleto de bellezas arquitectónicas que te recomendamos dar un paseo relajado para disfrutarlas todas. Sobre lo alto de una gran escalera, destaca imponente la fachada de la catedral de San Jorge, símbolo de la ciudad. Módica es también la ciudad natal de Salvatore Quasimodo, poeta ganador del Premio Nobel de Literatura. Aquí se encuentra la casa en la que el escritor pasó parte de su vida, intacta con sus recuerdos y fotos. No te vayas sin probar su famoso chocolate. Llévatelo a casa: ¡está riquísimo!

Ahora toca la espléndida Ragusa: dos ciudades en una, Ragusa inferior y Ragusa Ibla, la parte superior reconstruida después del terremoto de 1693.

Un símbolo renacentista de la ciudad es la catedral de San Jorge (Duomo di San Giorgio), con su suntuosa fachada barroca que sobrevivió parcialmente al terremoto; muy evocadora es la iglesia de Santa Maria delle Scale, con la portada del siglo XIV incorporada en la construcción de la nueva iglesia barroca. Una ciudad romántica, con una historia rica, una enogastronomía excelente y una acogida maravillosa.

El final ideal de este recorrido fascinante por la isla es la villa romana del Casale de Piazza Armerina, en la provincia de Enna, patrimonio de la UNESCO, y el cercano yacimiento arqueológico de Morgantina: ¡podrás contemplar unas maravillas únicas en el mundo!