CASTILLOS DE LA SICILIA CENTRAL

Dettaglio

“Damas, caballeros, armas y amores”: quizás sean estas las primeras imágenes que vienen a la mente cuando uno piensa en la infinidad de castillos que pueblan nuestras tierras. Tiempos tan lejanos que parecen míticos y de cuento de hadas… Sicilia tiene más de doscientos castillos: ¿están listos para sumergirse en mundos donde la historia  encuentra  la fantasía? En este itinerario exploraremos los castillos del centro de la Isla, completamente inmersos en la naturaleza. Aquí el tiempo parece haberse detenido realmente…

Si vienen del sur, la primera etapa de nuestro viaje sigue siendo cerca de la costa: Gela. Su Castelito de orígen suabo  descansa sobre una colina calcárea y domina el golfo para defender la ciudad. Desafortunadamente hoy en día no se puede visitar, excepto desde el exterior, pero la visita aún vale la pena: disfrutarán de una vista impresionante que se extiende por toda la llanura de Gela. Luego el Castelito está animado por una serie de leyendas. Se dice que en la antigüedad el castillo estuvo habitado por una hermosa castelana de pelo largo y todos los habitantes del lugar eran  atraídos por su belleza, pero quienes se atrevieron a acercarse terminaron desapareciendo en el aire. No solo eso: según los campesinos, extrañas sombras vagaban dentro de los muros del castillo quizás fantasmas de tiempos lejanos, detenidos allí para proteger un tesoro precioso (una truvatura, como se le llama en gran parte de Sicilia). Nadie ha logrado encontrar el codiciado cofre, ¡tal vez ustedes puedan ser los afortunados!

Ha llegado el momento de volver al interior, próximo destinación: Butera. Su Castillo fue el núcleo central de un baluarte en torno al cual se ha ido configurando el casco histórico de la villa, a 400 m.s.l.m. De orígen árabe-normando hoy la corte interna es la plaza pública y sus imponentes ruinas se utilizan como espacio expositivo. Por lo tanto, el castillo todavía tiene vida propia y la vida de la ciudad continúa a fluir alrededor y dentro de él. Imposible perderse esta etapa si se quiere rebobinar la cinta del tiempo.

Seguimos avanzando hacia el centro de la Sicilia y nos detenemos en Mazzarino, un encantador centro barroco que traiciona sus orígenes medievales por la imponente presencia de los Cannuni, como se llama aquí al Castillo de Mazzarino, por la particular forma de su torre. Según algunos  sus orígenes serían incluso romanas, aùn si luego sufrió varios cambios a lo largo de los siglos hasta llegar a la actual conformación típicamente feudal. Caminar bajo u Cannuni es caminar en la historia y si tienen suerte pueden asistir a los espectáculos organizados en el teatro construido en la parte sureste de la casa señorial, con una vista impresionante que se extiende hasta el Etna.

¿Cansados? ¿Aún no? Porque los castillos del centro no terminan aquí. Avancemos un poco hacia el oeste, hacia Mussomeli para visitar una de las fortalezas más inaccesibles de toda la Sicilia. Construida entre los siglos XIV y XV sobre un macizo calizo a 80 m de altura, su estructura parece fundirse con la propia roca. Si les ha sorprendido la grandiosidad del Castillo desde el exterior, intenten entrar: un puente levadizo les introducirá seguido de un pórtico con arco apuntado. Enormes salas con bóvedas de crucería y establos con capacidad para 50 caballos se les abrirán. Una escalera conduce a los pasajes subterráneos excavados en la roca, algunos completamente a oscuras, llamados por la gente «cuartos oscuros» en los que al parecer se cometieron crímenes atroces. No es casualidad que se diga que el Castillo está habitado por oscuras presencias… Un militar enamorado de la hija de Manfredi Chiaromonte  que se atrevió a desafiar al señor del lugar al fin de obtener  su mano,  fue encerrado en una torre del castillo hasta la muerte…. O las tres queridas hermanas del príncipe Federico, tan queridas que por celos locos al momento de partir para la guerra éste las hizo murar vivas para que no se le acercaran otros… O nuevamente la conocida historia de la Baronesa de Carini (Laura Lanza), asesinada por su padre Cesare Lanza, culpable de haber manchado el honor de la familia. El padre se refugió  en el castillo de Mussomeli por la indignación y aquí fue alcanzado por el espíritu de su hija que todavía, se dice, deambula por la casa señorial… En resumen, si creen en fantasmas o menos  el Castillo de Mussomeli  encanta en realidad por su belleza y grandeza.

Prosigamos ahora  virando ligeramente hacia el este para llegar al “ombligo de Sicilia” que con sus 950 m s.l.m. es la capital más alta de Italia: Enna ( ver enlace  Enna). A medida que se acerquen a la ciudad, incluso desde lejos podrán ver el Castello di Lombardia que se encuentra en el punto más alto de la ciudad. El señorío fue uno de los baluartes defensivos más importantes de la isla en época medieval y debe su nombre a una guarnición de soldados «lombardos» (es decir, genéricamente, «del norte») que se había puesto a defesa de la fortaleza durante la dominación normanda. El castillo debe su conformación actual a la planta de Suabia, mas  tiene sus raíces incluso en la fortaleza que construyeron los sicanos hace más de dos milenios. Con sus 26.000 metros cuadrados de superficie es uno de los castillos medievales más grandes de Italia y el primer parlamento siciliano fue convocado aquí por Federico II de Suabia. En su interior, la Iglesia privada y la casa del emperador Federico III de Aragón aún son visibles y se pueden visitar. Cerca del Castillo, en el espolón este de Enna se encuentra la Roca di Cerere  en la que se encontraba el templo que los sicanos habían erigido para venerar la diosa de la cosecha. La zambullida en el pasado se vuelve aquí vertiginosa, al igual que las alturas. Pero aún no se ha terminado… Existe otra fortificación que junto con el Castillo representa el mayor símbolo arquitectónico de la ciudad: la Torre de Federico II. Comúnmente atribuido al famoso emperador, sus orígenes continúan a encender debates y aumentar el misterio. De hecho, hay quienes quisieran que fuera un observatorio astronómico mucho más antiguo, construido por los sicilianos en el centro exacto de Sicilia en particular alineación con los cuerpos celestes. ¡Por lo tanto, pueden estar en el centro de la isla y al mismo tiempo en contacto con el cosmos!

Después de haber casi tocado las estrellas volvamos a la ruta y crucemos el centro de la Sicilia en dirección norte. Llegamos a la última etapa de este recorrido por los Castillos de la Sicilia central: el Castillo de Sperlinga. Una espectacular fortaleza íntegramente excavada en la roca en torno a la cual se desarrolla todo el antiguo núcleo habitado: una cincuentena de cuevas  que formaron la denominada “ciudadela bizantina” y en cuyo interior se encuentra hoy funcionando un museo intraantropológico. Desde aquí la vista sobre el paisaje es incomparable. En el interior de la sala de recepción aún son visibles la capilla y la ventana ajimezada.

Si aún no están cansados de damas, fantasmas y castillos pueden continuar el recorrido de los castillos hacia el oeste, hacia el este, hacia el Etna o al sur.

¡Comparte este contenido!

LOCALIZACIÓN

DURACIÓN

Distancia

Dificultad

Lugares

ALREDEDOR