Fiesta de Santa Lucía en Siracusa

Detalles

Las celebraciones de Siracusa en honor a Santa Lucía comienzan la tarde del 30 de noviembre con la banda de música que desfila por las calles del centro histórico. El 9 de diciembre se realiza la exposición de la estatua plateada de Santa Lucía en la capilla dedicada a ella de la catedral. El 13 de diciembre comienza la solemne procesión de las reliquias y de la estatua plateada que atravesarán la ciudad para llegar a la basílica de Santa Lucía en el Sepulcro.

La procesión dura muchas horas y es una peregrinación sagrada, seguida por los devotos en procesión al grito de ¡Siracusana jè! (es de Siracusa). Muchas personas, con velas encendidas en la mano, hacen la procesión descalzas en señal de agradecimiento o para expiar sus pecados.

La estatua de Santa Lucía, escoltada por doce cilios, grandes candelabros de madera adornados con flores, es seguida por el carruaje del Senado y el cortejo, que viste trajes del siglo XVIII. Una vez en piazza Santa Lucia, es recibida por el sonido de las campanas que anuncian su entrada en la iglesia.

Durante los ocho días que permanece en la basílica, una multitud de fieles visita a la santa y al sepulcro de la mártir, donde normalmente se exponen las reliquias. El 20 de diciembre es el día del regreso de Santa Lucía a la catedral: en otra larga procesión y otro baño de multitudes, la santa hace una primera parada en la basílica santuario de la Virgen de las Lágrimas, y una segunda en el hospital Generale Umberto I, para un momento de oración

A su llegada al Ponte Umbertino, la ciudad saluda con fuegos artificiales a la santa antes de reanudar su camino hacia la catedral, donde entrará para regresar a su capilla.

Es una sensación inolvidable vivir un momento tan importante junto con la comunidad vinculada a la vida de la santa.